Que nuestro hijo tenga un buen desarrollo es algo que todo padre busca darles a sus hijos, pero si no lo hacemos de la manera correcta o le invertimos el tiempo que necesita nuestro hijo en ello, puede tener muchos problemas a futuro.  En Play All contamos con excelentes juegos para ayudarte con esta tarea. Hoy queremos compartirte unos tips para que este proceso sea efectivo. 

La directora del centro bilingüe de Estimulación temprana Brisbane señala: “Estimular a un niño significa ofrecerle estímulos que lo hagan feliz y lo apoyen en su desarrollo natural y esto lo hacemos todo el tiempo que estamos con él, y no saturarlo de actividades”.

1. Muestrales tu amor

El mejor estímulo para cualquier niño siempre será el sentirse querido. Por ello, el mostrarle a nuestro hijo todo lo que lo amamos, incondicionalmente, al igual que el equilibrio y bienestar emocional son fundamentales para el aprendizaje correcto y el desarrollo cerebral. 

Con mucha ternura, muchos besos, palabras cálidas y contacto piel con piel es como se lo expresamos. De esta manera, siempre sabrá lo importante que es para nosotros y evitaremos malcriar a nuestro pequeño.

2. Dedica tiempo

El objetivo de pasar tiempo con ellos, más que enseñarle cosas, es relacionarnos con él o ella, para establecer un vínculo afectivo y así conocerlo mejor; saber qué es lo que lo calma, lo pone nervioso, lo hace reír, etcétera. Para conseguirlo, es necesario dedicarle toda nuestra atención. 

3. Diversión

La mejor manera de pasar tiempo con él e invertir el tiempo es divirtiéndonos junto con él, no convertir el juego en una obligación. Para lograr un mejor resultado juega sin reglas. El juego debe ser espontáneo, es algo natural en tu bebé y fundamental que también uno lo sienta así. 

4. Seguridad

Para animarlo a aprender, es de suma importancia que le bridemos el mejor ambiente para ello, con un entorno seguro y adecuada a su edad. Él o ella quiere agarrar todo, experimentar y aprender, pero no sabe lo que está bien o mal. Por eso es importante que tengamos cuidado con ellos y estar al pendiente de lo que hacen durante esta etapa, pero sin exagerar y transmitiéndoles miedo o fracaso. 

Debemos dejar que aprendan por ellos mismos, pero manteniéndonos cerca de ellos y orientándolos para un mejor crecimiento. 

5. Respeto

Debemos respetar sus decisiones y no obligarlos a hacer algo para lo que no están listos todavía. No hay que sobre estimular a los niños, pidiéndoles que hagan algo cuando aún no han madurado lo suficiente. Tampoco es conveniente forzarlos a hacer algo que no quieren, que les aburre o que les irrita. 

Ahora que lo sabes, busca el mejor momento y entorno para que tu hijo tenga un desarrollo completo y efectivo, compartiendo con ellos cada momento y buscando siempre lo mejor para ellos.

Con apoyo de Padres e Hijos